martes, 31 de marzo de 2020

ciudades invisibles












Las ciudades modernas que conocimos hasta ahora tenían dos claros extremos, lo público y lo privado.
El espacio urbano y el espacio privado.
De un lado la plaza, la calle, la esquina y del otro, tu intimidad.

Lo público era el lugar del encuentro, el lugar del juego, el lugar del cielo, el lugar del sol, el lugar de todos, el lugar de algunos, el lugar de la alegría, el lugar de la represión, el lugar de aprender, el lugar donde se nos aparecía el otro.

El aislamiento dinamita estos conceptos. 
Lo público es el lugar del miedo, es el lugar del virus.
La sociedad se trasladó a lo privado, la sociedad se invisibilizó, la ciudad se reconfigura hacia la inutilidad.

Lo público se instaló en las redes, las calles se vaciaron.
Lo público de instaló en las redes, las autopistas parecen ruinas de un mundo perdido.
Lo público se instaló en las redes, los encuentros están sumergidos en alcohol en gel.

Hoy hay ciudades invisibles detrás de las paredes, como será que nos volveremos a encontrar? donde nos volveremos a encontrar? cuando será que nos extrañemos lo suficiente?

Yo te quiero abrazar, mejor que antes, distinto que antes.
Lo diré una y otra vez.
Hasta entonces.

Abrazo
Gustavo Barbosa

(perdón señor Italo por usar su título)

fotografía:  Julie de Waroquier

Manu: Espero encontrarte cuando salgamos a la calle otra vez

jueves, 26 de marzo de 2020

nuestro amigo Ruben





Eran días de adolescencia, finales de los 60' y principios de los 70'.
Íbamos al Huergo, allá en Caballito, en la calle Juan José Biedma, la cuadra de la Esso, casi llegando a Yerbal.
Los dos últimos años íbamos al turno noche y nos sentíamos veteranos! 
Era otro mundo y muchas noches nos volvíamos caminando a casa, las más con mi querido amigo Alfredo.
Eramos pocos esos amigos, Lucas, Alfredo, Gustavo, Ruben y yo. Eramos rockeros antes de que la música que nos gustaba se llamara rock. Era apenas música beat.
Nos miraban raro, no era común darle a la música un lugar especial, tan especial. Fuimos a los primeros recitales, en horarios imposibles, domingos a la mañana, por ejemplo. 
Nacían Almendra, Manal, Moris, Arco Iris, Vox Dei, jaja, ni siquiera Sui Generis sonaba todavía.
Íbamos a Radio El Mundo, Maipú 555, al programa "Música con Ton Son & Williams" que iba de 0 a 5 de la madrugada (creo) y llevábamos nuestros primeros Lps y fumábamos y era el cielo, que otra cosa! No había 80 FM s, tan solo dos programas "Modart en la Noche" y el ya nombrado el de la sastrería Thompson & Williams.

Fuimos juntos en el '69 al Festival Pinap en el Auditorio Buenos Aires, ese del que nadie se acuerda.
Fuimos al primer BaRock en el Velódromo cuando todo empezaba y estábamos allí, al pie del cañón o mejor, al pie de los escenarios.
Fuimos al segundo y fuimos a mil lugares más, eramos felices.

Cada día librábamos una batalla campal con el Jefe de Preceptores para sobrevivir a la requisa para constatar el largo del pelo. Cada día: "tomen distancia" y a rezar que el enano fascista pasara de largo.

Al terminar nuestra vida en el Huergo, los caminos se bifurcaron y nos dejamos de ver por algún tiempo.
Los años se pusieron pesados, la vida se puso difícil.
Algunos entraron a la Fau de entonces, en Ciudad Universitaria, otros tomamos otros rumbos.
Con el tiempo nos reencontramos y nos fuimos contando que Gustavo se había escapado a Brasil durante la nefasta dictadura del 76 y que Ruben había desaparecido en ese mismo año, un 14 de septiembre.

El resto es historia reciente. 
La ahora Fadu homenajea cada día a sus desaparecidos en la bandera que da marco a nuestro patio central.
Cada día que entro al Pabellón 3 miro para ese lado y busco la foto de Ruben que me guiña un ojo y me tararea "No Pibe" o "Muchacha, Ojos de Papel" o una de las que sabemos todos.
Y pienso: no te aflijas amigo, la música sigue sonando y te recordamos...







Abrazo
Gustavo Barbosa

fotografías: Alfredo Svarzchtein

Moris compuso este tema y nos metió el dedo en el c... sin anestesia alguna

lunes, 23 de marzo de 2020

virucrisis


























En estos extraños días en que nos rodea un extraño depredador invisible con un inteligente mecanismo de evolución que se activa con nuestras incautas células haciendo evidente una fuerza universal que puede vapulear sin hesitar nuestro engreído mundo, es menester pensar.

Aunque irrite.
Aunque tengamos miedo.
Aunque nos hagamos los distraídos.
Aunque seas un tirifilo.

Crece la sensación de que todos estamos volviendo al útero, esa burbuja que nos cobijó y alimentó por unos meses hasta que te encontraste cara a cara con una mujer maltrecha a la que aprendés a llamar mamá y el trabajó comenzó.

Lacan decía que cuando llegamos al mundo la fiesta ya está empezada, una observación muy precisa. Hoy me pregunto donde está la fiesta. Hicimos pelota al mundo y ahora parece que hay que pagar los platos rotos.

Cuando volvamos a nacer de estos improvisados úteros, cuando ya no esté la tal mamá, cuando todo quede cuestionado, cuando todo intente volver a una "normalidad" que parece que ya expiró, como vamos a caminar?

Nos bajaron el copete con un proto bicho que parece mucho más peor que la criatura de la película "Alien" del genial Ridley Scott. 
Que además ni siquiera se muestra, el muy pillo.

Cada uno sabrá como sale de estos días, tengo claro que es pensando en el otro y solo así
que se podrá volver a intentar.

Aprovechemos estos día de útero forzado ( muchos no lo pueden tener!!!) para deconstruirnos concienzudamente y tirar sin piedad los cachos que estén demás.

Abrazo (sí, abrazo)
Gustavo Barbosa

fotografía: autor desconocido

lunes, 16 de marzo de 2020

no escribo




































no beso
no abrazo
no salgo
no entro
no escribo
no hablo
no digo
no río
no soy

Parece que el mundo se recoge a sus zonas de miedo y en esos lugares, todo se disloca.
Es difícil escribir sin caer en la sorna o en el humor negro, casi una especialidad de quien les escribe, pero...la cosa está rara.
Un virus, un ente casi imbatible está alterando el mundo entero. Un virus que despierta lo peor de todos nosotros, despierta el miedo.

Siempre me fascinó la Edad Media, sus oscuros talismanes, sus colores, sus misterios, sus estados y hoy de repente, parece que repletos de tecnología, todos nos volvemos ciudadanos de temores desconocidos, puestos adrede o no, quien sabrá? 
Ciudadanos del Oscurantismo (mal llamado así)
Somos los mismos de entonces, con telefonito, pero los mismos.

te beso
te abrazo
te salgo
te entro
te escribo
te hablo
te digo
te río
soy

Acá estoy, acá estamos, todas y todos, aprendiendo...aprehendiendo, como cada día, solo que ahora es a coro.
No me fui, no me voy.

Abrazo ( apretado y virtual, si querés)
Gustavo Barbosa

imagen: Adara Sánchez Anguiano

voy a ser difícil con el video, lo sé...

martes, 10 de marzo de 2020

jóvenes


La imagen puede contener: 1 persona, de pie e interior
El mundo se debate entre seguir haciéndose el boludo frente a todo lo que lo confronta, o, hacerse cargo del desastre tan anunciado. El mundo somos nosotros, soy yo, sos vos, la tía Cholonga o el señor de la esquina que te habla y habla, de triste que está.
Tantas veces escuché de puntos de inflexión, de crisis, de encrucijadas, de miedos, de angustias y...acá estamos, acá y así.
Cuando sos joven vivís en un estado de proto vida que no tiene amortiguador alguno y eso era así. Digo, era así, porque ya no es más así. Hoy, los que son jóvenes se inundan de la cruda realidad antes de ejercer la juventud y entonces ya nada es igual.
Se hacen cargo de lo que hay que cuidar porque el mundo será lo que les dejemos, después de tantos años de despilfarro y de inconsciencia.
Por eso y por tanto más es menester estar cerca de los jóvenes que casi son nuestros mayores en ésto de las búsquedas y las luchas.
Es complejo vivir, es complejo no caer en la necedad, es complejo ser consciente aunque por momentos no parezca luminoso. Lo es.
Quedate cerca del ser joven, tiene cerca el amor.
Abrazo
Gustavo Barbosa

para laslos jóvenes que quiero tanto tanto
fotografía: Anka Zhuravleva ( love)