Merodear los bordes tiene altos riesgos.
Un día de confiado nomas, te pasas del otro lado,
y entonces, que se puede hacer?
1. Volver amedrentado
2. Entrar en pánico
3. Disimular
4. Correr el borde y seguir merodeando
5. Disfrutar/ gozar/ aplaudir
Para que sirve Dibujo? Para que se enseña a dibujar? Para que el para que?
Han tratado de ampliar mi concepción, pero yo de terco inveterado,
trato de ubicar a esta materia en lugares de riesgo.
Entre la especificidad de lo técnico, entre la necesidad de respuestas de los diseños,
entre el orden de las ciencias duras, entre la necesidad de expresar, entre la forma como herramienta, entre la nada y la eternidad.
Entre toda esta inestable trama, podemos vislumbrar siempre que hay más.
Y que hay lugar para todos, mas o menos rígidos, mas o menos confiados,
mas o menos concientes.
Como dibujo algo que se mueve?
Como está pasando ésto?
Como meto todo ésto en un dibujo?
Estas preguntas y tantas otras, se instalan y no se van nunca más.
Algunos las harán en voz baja, las negarán, las harán a viva voz, las sufrirán,
o las llevarán guardadas en oscuros rincones. Pero si meten la mano hasta el fondo,
allí van a estar, listas y dispuestas.
Dispuestas a joder.
La experiencia de esta semana tiene algo especialmente conmovedor.
Mucho hablamos del cuerpo, sus formas y su implicancia
en nuestro mundo de hacedores de proyectos. La aparición de estos bellísimos cuerpos
en nuestros talleres, materializó las formas del afecto al que incansablemente
intentamos convocar.
Nosotros, ellos, la música y los dibujos. Una imagen simple.
Una imagen fantástica.
Formas en movimiento.
Afecto en movimiento.
Esto también es Dibujo
Gustavo Barbosa
fotografías: Lucía Stagni
bailarines: Ladis Victoria Osorio Samaniego, Guido Bonacossa
músicos en el taller: Juan D´Ambra, Jerónimo Correa
imagen: Ignacio Carbonari
video: Gotye/ Kimbra "Somebody that I used to know"
(gracias Jade!)