En el diario trajín a través de la ciudad podemos disfrutar de todo tipo de delicias, automovilistas trastornados, asesinos encubiertos en bicicleta, colectivos en vuelo rasante, ruido, humo, más ruido, bocinas, impaciencia, histerias y rastros de barbarie.
Sin embargo si observamos con especial detenimiento podremos encontrar un mensaje subliminal de amor que nos enfrenta con aire desafiante desde la luneta trasera del automóvil que nos precede.
Estas osadas exhibiciones de familia explícita me...
Sin intentar menoscabar la acción constituyente de la familia en el tejido social, esta ostentación del orden, del bien como Dios manda, de mostrar lo correcto y dejar por fuera, lo distinto, lo incorrecto, genera profundos sentimientos de exclusión.
La muestra innecesaria de un sospechoso estado de felicidad doméstica recortan del mapa de nuestra benemérita clase media, todo lo que sea otra conformación social, la soledad, las asimetrías, las parejas del mismo sexo y toda conformación que no sea la "normal".
Nada parece inocente en el escenario que nos toca, diría mejor, que nos amenaza.
La exaltación de lo individual, aunque del grupo familiar se trate, insolidariza nuestras conductas y nos enceguece a la otredad. El tejido social requiere de un estado de alerta permanente, so pena de quedar encerrados en el gelatinoso universo del ombligo propio.
Abrazo amigos
Gustavo Barbosa
La exaltación de lo individual, aunque del grupo familiar se trate, insolidariza nuestras conductas y nos enceguece a la otredad. El tejido social requiere de un estado de alerta permanente, so pena de quedar encerrados en el gelatinoso universo del ombligo propio.
Abrazo amigos
Gustavo Barbosa
Tortita de manteca... Mamá me da la teta,
ResponderEliminarTortita de cebada... Papá no me da nada
Y como no habría que estar atentos si la construcción viene desde la leche temprana, como cantaba Serrat y consolaban nuestras penas de niño con esos versos
El mal se reproduce con suma facilidad, mi amigo
EliminarAbsolutamente de acuerdo, falta que a la nena le pongan una muñeca en la mano y al nene una pelota o un autito ... es muy desalentador!, por casualidad el auto no lleva también un par de anteojeras como lo caballos?
ResponderEliminarjaja, así debe ser Claudio! Un mundo de anteojeras...
EliminarBienvenido por estos pagos señor!
estaba abierto el mail de clau, pero la que escribí fui yo, paula
EliminarPaula!!
Eliminarsíi, paula silvestri. no sé porque cuando escribí la primera vez la compu asumió que escribía claudio y yo no me dí cuenta. Recién nuevamente tuve que cambiar el url. Cosa e mandinga!!!
Eliminarabrazo!
Abrazo!!
Eliminartendríamos que hacer un calco de nuestras familias, sus inclinaciones, gustos y aspectos y veríamos a mamás bueeeeenas asustadas tapando los ojos de sus pequeños y rubicundos niños que miran azorados desde la hermosa camioneta a nuestros dibujitos intimidantes, franciscos, pettites, juanitos y jades con caritas malitas y gestos obscenos, jaja una indecencia total
ResponderEliminarbesos para nuestros fabulosos niños
Siempre es un placer leerte Barbo
ResponderEliminarGracias Dani!!
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