sábado, 14 de noviembre de 2015

los martes orquídeas


























Que momentos de extraña particularidad son los finales de cursos...
Vertiginosos, trajinados, con un aire de cansancio amable, algo melancólicos,
pero con la sensación de que el aire del taller ha mutado una vez más y se ha encendido la alquimia del afecto.

Cuesta apagar la luz y cerrar la puerta, casi un ejercicio de inutilidad supina, porque no sucede. La puerta no se cierra, la luz sigue encendida y las huellas son de una persistencia demoledora.

Cada año me vuelvo a hacer la misma pregunta, 
Sirvió?
Alguien habrá aprendido algo?
Valió la pena?
Cual es la verdadera cuestión?

Las respuestas serias serían posibles. Las respuestas serias no tienen demasiado sentido en estas circunstancias.
Elijo pensar en repuestas fenomenológicas, de carácter transmisible y reconocibles a nivel epidérmico. Prefiero tratar de explicar como caras anónimas se van transformando en caras amigas, en risas entrañables y en vínculos indelebles. 

Elijo pensar en como sucede que todos nos dibujamos entre todos.

Quizás sea parte de la vida aprender a reconocerse y representarse, por ello las imágenes se transforman en nuestra formas de formarnos, como individuos, como grupos, como sociedad, por eso hay que aprender a dibujar.

Estar en el umbral de la Fadu es un privilegio que intentamos sostener con convicción,
ya que es un espacio de delicada filigrana emotiva donde trabajamos de lo macro a lo micro, para reconsiderar el vínculo inicial, para ahondar en los alcances posibles y más aún en los, aparentemente, imposibles.

Se agradece mis queridos. Se agradece la confianza y la voluntad de transitar, porque la vida es eso, movernos, solos o de la mano, pero movernos. 
Con ustedes el camino es decididamente muy agradable.

Abrazo a cada uno, uno por uno, y sepan que, con absoluta conciencia, los vamos a extrañar
Gustavo Barbosa

























5 comentarios:

  1. natalia materializa la confianza que depositan ustedes en nosotros
    yo le grito desde la puerta del taller para saludarla
    y ella levanta sus brazos para contestar mi saludo
    nos damos un abrazo entrañable
    eso es todo lo que se puede pedir, jaja
    besos a cada uno de los personajes del taller, moi

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    1. Esos abrazos configuran las formas del taller, como un único ser, el que nos lleva a aprender

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  2. nataliaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa, no pares de molestar

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    1. ojo con natalia!!!
      jaja, miren que estamos tramando cosas juntas, ehhhh
      beso beso beso!!!!

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